Una característica muy importante del pensamiento divergente es su desvinculación de patrones preestablecidos lo que permite el fluir de las ideas libremente. Otro tipo de pensamiento libre lo hallamos en la imaginación, la cual está íntimamente relacionada con el pensamiento divergente, cuando se imagina se crea se elaboran soluciones de forma libre y en muchas ocasiones de forma contrario a lo preestablecido, en esta línea de Bono (1970) desarrollo el término pensamiento lateral para describir un tipo de pensamiento distinto al pensamiento convencional o lógico, para este autor el propósito más importante de la creatividad es hacerlo todo simple y efectivo y para ello hay que pensar mucho y elaborar una gran cantidad de pensamientos simples y efectivos.

De Bono (1970) afirma que: “La necesidad del pensamiento lateral deriva directamente de los características de funcionamiento de la mente. Aun cuando el sistema ordenador de la información que posee la mente es de gran efectividad, presenta ciertas limitaciones que le son inherentes. Tales limitaciones son inseparables de las grandes ventajas, ya que ambos factores, limitaciones y ventajas, tienen su origen en la naturaleza misma del sistema. Sería imposible tener las ventajas sin las desventajas. El pensamiento lateral es un intento de compensar esa limitación sin menoscabo de las ventajas” (p.21), implicando que la producción en cualquier ámbito requiere del pensamiento lineal o convergente para generar ideas o productos creativos e innovadores, además sería imposible para el ser humano desarrollar cualquier actividad sin la función de los dos pensamientos pues el cerebro no trabaja sin asociación, por lo contrario requiere procesos multitareas que activan diferentes funciones cerebrales.

Por otra parte según Vergara (1989), “El Método Silva” de control mental (1989) es  una de las herramientas de control mental más populares  del mundo que se fundamenta en el desarrollo del pensamiento divergente, donde las técnicas  como la visualización se enmarcan en el fomento y desarrollo de pensamiento creativo, auto controlando impulsos y pensamientos que obstruyen la fluidez de la divergencia, como como el establecimiento de metas que está encaminado a orientar las facultades ejecutivas del cerebro, indicando con esto que las potencialidades del pensamiento divergente son entrenables y que requieren trabajo, esfuerzo y disciplina, además de conllevar ciertas acciones definidas y claras para lograr el objetivo.

Escrito por: Rafael Boada. Coordinador Académico

Fuente: https://finef.com.co/como-aprendemos-es-como-ensenamos/

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